CIERRES AFECTIVOS
Todo tiene su tiempo, y todo lo que se quiere debajo del cielo tiene su hora.
Tiempo de nacer, y tiempo de morir, tiempo de plantar, y tiempo de arrancar lo plantado;
Tiempo de matar, y tiempo de curar; tiempo de destruir, y tiempo de edificar;
Tiempo de llorar; y tiempo de reír; tiempo de endechar, y tiempo de bailar;
Tiempo de esparcir piedras, tiempo de juntar piedras; Tiempo de abrazar y tiempo de abstenerse de abrazar;
Tiempo de buscar; y tiempo de perder; tiempo de guardar, y tiempo de desechar;
Tiempo de romper, y tiempo de coser; Tiempo de callar; y tiempo de hablar;
Tiempo de amar, y tiempo de aborrecer; tiempo de guerra, y tiempo de paz.
Eclesiastes3
La reacción adaptativa a la perdida de una persona amada
es un periodo bastante largo de pena y dolor, seguido por un
renacer de interés por las personas vivas y las cosas en general...
La reacción de agarrarse tiene por objeto inhibir las emociones
suscitadas por la perdida y mantener presente
a la persona en la fantasía.
STEPHEN A. TOBIN
El proceso, desde darse cuenta de que algo no anda muy bien hasta sentirse realmente molestos, vacíos o frustrados y que el conflicto resulta evidente para los dos, es llamado proceso de cierre o individuacion. Por lo general, dicho proceso es caracterizado por una reflexión en forma de monologo interior en el que no faltan las decepciones, las frustraciones, las culpas o los resentimientos. En el secreto desván de su alma, la persona procesa y sopesa las experiencias vividas para evaluar si sigue adelante con la relación, los peligros de seguir igual, los riesgos de hablar lo que le esta pasando, etc.
Muchas personas suelen pensar en que el tiempo lo arreglara, en que algo pasara o en que la otra persona se dará cuenta de la situación y entonces hará los cambios. Pero lo cierto es que mantener el malestar en secreto hace que la relación peligre, pues la tensión interna buscara salida de cualquier forma, la cual puede ser mediante mentiras, indirectas, pases de facturas, infidelidades, agresiones, enfermedades y accidentes.
En el manejo de esta etapa tan difícil, lo ideal es atreverse a hablar con la otra persona involucrada en la relación y expresarle lo que pensamos, lo que sentimos, lo que tenemos y lo que preferiríamos.
Por otra parte los cierres forzosos, aquellos "adioses" que nunca hubiésemos querido dar, (Por ejemplo, las perdidas definitivas de los seres queridos o las perdidas temporales como la imposibilidad de seguir cercanos), nos llevan a evitar el dolor de la separación.
Para algunos, esa forma de evitar el dolor se convierte en una negación del proceso de duelo y reacomodo. Para otros, acariciar insistentemente los recuerdos, al punto de perder de vista el presente y el futuro, es la manera de mantenernos unidos al afecto que ya no existe. Cualquiera de las dos formas conlleva altos riesgos, porque los individuos no se limitan a madurar, crecer y aprender para nuevas y mejores etapas de la vida relacional.
Querida lectora como te habrás dado cuenta inicie esta publicación con eclesiastes 3, precisamente por que es un hermoso pasaje que nos habla de los tiempos, y por mucho que nos resistimos a cambiar el orden de la vida, todos estamos regidos por el tiempo. Que difícil es para los seres humanos aceptar los tiempos de Dios para nuestras vidas, cuando es tiempo de arrancar queremos plantar, cuando es tiempo de abrazar simplemente no lo hacemos y así con muchas cosas mas, el ejercicio de esta lección es que reflexiones acerca de los cierres que necesitas hacer en tu vida sentimental, tu sabes perfectamente cual es la situación o relación que no has querido afrontar pero entre mas lo evites, te provocaras dolor y sufrimiento. Tal vez es tu matrimonio que necesita cambios, cerrar etapas y abrir nuevas oportunidades dentro de tu relación, tal vez la relación con tu madre, tal vez ya se fue alguien especial en tu vida y hubo cosas que no dijiste, que no aclaraste o que no demostraste, yo creo que es tiempo de voltear y reflexionar acerca de lo que se necesita arrancar, acerca de lo que se necesita matar dentro de notros, de aquello que es tiempo de curar, aquello que se tiene que dejar de abrazar...